El Homo erectus ya podía sobrevivir en zonas desérticas hace más de un millón de años, según un estudio que cuestiona la idea de que esta capacidad de adaptación surgió mucho más tarde, con el Homo sapiens.
El Homo erectus ya podía sobrevivir en zonas desérticas hace más de un millón de años, según un estudio que cuestiona la idea de que esta capacidad de adaptación surgió mucho más tarde, con el Homo sapiens.