El trópico ardía en la piel y su humedad ablandaba los huesos. Laura llevaba ocho meses en el selvático Chocó; hacía labor de trabajadora social y formaba parte del equipo misionero. Sus padres, antioqueños de goda prosapia, sintiendo que su ausencia se hacía larga y triste, viajaron desde Medellín hasta aquellas comarcas perdidas. Querían probar...