A la misma hora y de manera simultánea se atacaba a las comunidades que han recuperado la hacienda El Guayabal, del cual no se tienen cifras precisas de heridos, detenidos o desaparecidos.
Por su parte, y en medio de la defensa implementada por las comunidades, un Capitán de la policía quedó bajo custodia de la guardia indígena. Al momento de revisar su estado se encontró que estaba con heridas en su cabeza y se procedió a prestarle los primeros auxilios.
Desde las primeras horas del día 10 de septiembre se busca que se lleve a cabo un intercambio entre indígenas y la policía. Al mismo tiempo, que se aborde un diálogo que de verdad produzca una solución inmediata y satisfactoria para estas comunidades que durante años han sido engañadas e irrespetados en sus derechos.
Tras 8 días de esta lucha por el derecho a la tierra y sin encontrar interés en el alto Gobierno por brindarle solución adecuada, se hace indispensable que el movimiento social a nivel nacional se movilice en defensa de sus hermanos.
No hay mayor esperanza que la solidaridad.
Por periódico desde abajo
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