La experiencia y visión de Sarare fm Stereo (municipio de Saravena), Arauquita Stereo (municipio de Arauquita), dos emisoras comunitarias consecuentes con su sentido comunitario.
De la ilusión a la realidad. Existen dos emisoras comunitarias en el departamento de Arauca que en el curso de su existencia han forjado un espacio de confianza y credibilidad con la población que las escucha, lo que generalmente es conocido como audiencia: Sarare fm Stereo (municipio de Saravena), Arauquita Stereo (municipio de Arauquita). Con el enfásis informativo que manejan y el enfoque que le brindan al cubrimiento de la realidad cotidiana, ambas se han ganado la confianza de las famllias, para que les permitan entrar en sus hogares llevando la información del día a día, contribuyendo de manera decisiva a la formación integral de una comunidad crítica.
Las emisoras, con 22 y 10 años de existencia respectivamente, reflejan y son parte de un proceso de articulación y organización social comunitaria, que arranca desde el mismo momento en que empiezan a llegar a esta parte del país familias desde otros departamentos, allá por la década de 1960. Realza, como parte de su filosofía, que la comunidad es el componente especial de las Juntas Directivas de estas emisoras.
En ambos casos, la junta directiva tiene poder de decisión de la comunidad y las organizaciones sociales del territorio, haciendo que el ejercicio comunicacional radial de ambas emisoras esté dentro de los lineamientos del Plan de vida (ver recuadro). En el papel especifico de los medios radiales, sus contenidos van encaminados a fortalecer el tejido social con programas que impulsan las asociaciones de mujeres, campesinos, jóvenes, Asojuntas, corporaciones de derechos humanos y los espacios noticiosos, como el Informativo Centro oriente y Notifrontera.
El enfoque en estos contenidos, integra la visión crítica de la realidad que no se inclina por la versión impuesta por los medios privados de información, por lo que se ha instalado una opinión pública critica, favorable a las transformaciones sociales de la sociedad colombiana.
Contenidos
Con los años de experiencia acumulados por estas emisoras comunitarias, se ha consolidado una referencia de opinión legitimada por la comunidad local y departamental. Entonces, la radio refuerza desde lo comunicacional la agenda del movimiento social, al darle amplitud y al fortalecer el sentido político de la movilización y organización de las comunidades.
Es así como las emisoras cubren las movilizaciones, paros, encuentros, foros y toda clase de actividades hechas por el movimiento social departamental, nacional e internacional. Incluyen campañas contra los megaproyectos como la explotación petrolera, siendo el complejo Caño Limón el caso más emblemático en el territorio, por lo que el rechazo a este proyecto ha hecho parte del lenguaje radial.
Las violaciones de los derechos humanos por parte del Estado también se informa a través de los programas radiales, denunciando el terrorismo estatal que ha tenido diversos casos en este territorio, como masacres, desplazamientos, desapariciones forzadas a raíz del conflicto armado, cobrando miles de vidas inocentes en la comunidad. Las emisoras comuntarias araucanas han estado del lado de la gente y no del Estado, porque en el esfuerzo de informar la verdad, se ha tenido que demostrar los responsables de la violencia sistemática y directa contra las comunidades.
Asímismo, la formación tiene su espacio dentro de estos medios radiales comunitarios, porque se incluyen a jóvenes y niños en algunos de los programas cotidianos, a manera de semilleros radiales que a largo plazo se vinculen al medio. Los trabajadores de la emisora comparten sus conocimientos en radio a las nuevas generaciones y éstas, a su vez, retroalimentan la experiencia radial con las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, como redes sociales, ya que las emisoras también manejan la señal virtual y sus propias perfiles en Facebook y Twitter.
Esta interacción con la comunidad, en el marco de la formación radial, afianza los lazos que tiene en el territorio porque no solo se posiciona como un referente de opinión crítico, sino también como un referente formativo que comparte su experiencia radial con quienes voluntariamente se acerquen y participen de los proyectos anuales que las emisoras abren.
Además, el ejercicio comunicacional del medio le permite obtener la información de varias fuentes comunitarias e institucionales, legales y legitimas de los hechos diarios que se desarrollan en la localidad y a nivel nacional; esta capacidad, convertida en poder en nuestros días de Guerra de cuarta generación, le otorga la ventaja de construir una perspectiva crítica del mundo, y aportar a la disputa de sentido frente a las matrices de opinión de los medios privados de información.
Los valores de la solidaridad y respeto entre la comunidad, le ha permitido ganarse la confianza del público, al informar los problemas, las denuncias, quejas que se presentan en el diario vivir, en temas como las EPS, desastres en épocas de invierno, violaciones de derechos humanos de la Policía Nacional, Ejército nacional y otras autoridades, funcionarios públicos de administraciones locales o departamentales, fortalecen su legitimidad que la emisora radial necesita para ser un actor propositivo y activo en los conflictos diarios.
Reglamentación limitante
El problema de no incidir eficazmente en el ordenamiento territorial local y departamental, es que la normatividad colombiana en materia de medios radiales limita a la emisora comunitaria económica y geográficamente, la asfixia financieramente, presionánola siempre para que no arrincone a la radio comercial, siempre al servicio de los poderes tradicionales en la región y el país. Esta concepción empresarial de la comunicación radial expone su carácter limitado o técnico, con el cual el medio informativo no es un actor político sino un simple parlante para la transmisión de información.
Si la concepción de los medios comunicacionales fuera lo contrario, podría tenerse una normatividad que impulsara el fortalecimiento de los medios de comunicación para que aportaran al crecimiento de un tejido social crítico, organizado, movilizado, con valores propios distantes de los del régimen capitalista-neoliberal.
Por consiguiente, estas emisoras comunitarias araucanas pueden caracterizarse como un actor político y social en este territorio, pues su articulación directa con la comunidad a través de su junta directiva, y la participación del movimiento social en este escenario de toma de decisiones, la incluyen en la hoja de ruta de este tejido social, llamado Plan de vida. Es decir, las emisoras comunitarias impulsan la defensa y permanencia en el territorio.
Recuadro
Memoria y Plan de vida
El departamento de Arauca posee un tejido social consolidado, desde la llegada de familias colonas provenientes de otros departamentos del país, en la década del 60. A partir de ese proceso colonizador se sufrieron los efectos del abandono estatal en materia de salud, educación, vías, apoyo para comercializar los productos agrícolas entre otros. Por eso, los paros del 1972, luego el de 1982, y seguidamente los procesos de movilización de los campesinos organizados en asociaciones de gremios como plataneros, cacaoteros, ganaderos alrededor de la cooperativa Coagrosarare son la piedra angular de la comunidad araucana.
Estos conflictos entre comunidad y Estado estimularon la creación de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional en esta parte del territorio, con el Frente Domingo Laín que desde inicios de los años 80 hace presencia con fuerte arraigo entre la población. Este actor hace parte del tablero social configurado en el departamento, donde las comunidades organizadas siguen siendo el actor principal de la movilización y organización social.
Este acumulado comunitario se condensa en el documento Plan de vida de las comunidades del Centro oriente de Colombia, en el que se plantea toda la cosmovisión de los campesinos, indígenas, obreros, jóvenes, mujeres, a través de los principales ejes como son salud, educación, medio ambiente, productividad y Derechos Humanos que exponen la interpretación del mundo y el tipo de relacionamiento que se tiene entre comunidades y naturaleza, dentro de un modelo social, económico y cultural distanciado del capitalismo. Esta hoja de ruta tiene como objetivo principal la defensa de la macro-cuenca de la Orinoquía al ser la fuente principal de agua y biodiversidad del centro oriente colombiano y uno de los objetivos de extracción que tiene el actual régimen en complicidad con las multinacionales.
Con la puerta abierta
La búsqueda de la unidad de las fuerzas de izquierda colombiana, para acrecentar la movilización en todo el territorio nacional y lograr los cambios estructurales requeridos en el país, deberán arrojar entre sus resultados históricos que en los territorios las emisoras comunitarias hagan parte de los procesos de ordenamiento territorial, construcción de política pública, manejo de recursos públicos y seguimiento a estos planes de vida como un actor más que propone y genera debate, y no como se hace todavía, que son invitadas para transmitir este tipo de eventos.
*Comunicador Social-Periodista
Sarare Fm Stereo
Saravena, Arauca
Bibliografía:
Amnistía Internacional (2007). Sindicalismo en Colombia homicidios, detenciones arbitrarias y amenazas de muerte. Editorial amnistía internacional (edai).
Barbero, Jesús Martín (2001). Reconfiguraciones comunicativas de lo público. México. Análisis.
Castells Olivan, Manuel (2009). Comunicación y poder. Madrid: Alianza Editorial.
Kaplún, Mario (2002). Una pedagogía de la comunicación (el comunicador popular), La Habana. Editorial Caminos.
Zibechi, Raúl (2006). Dispersar el poder, los movimientos sociales como poderes antiestatales. Bogotá. Ediciones Desde Abajo.
Leave a Reply