Según la encuesta del instituto demoscópico CSA, que publicará el domingo la revista “Marianne”, un 55% de los sondeados el pasado día 23 se pronuncian por el “no”, frente al 45% por el “sí”. El sondeo también indica que un 50% de los franceses planea abstenerse o emitir votos en blanco o nulos.
El sondeo anterior de CSA, realizado los pasados 16 y 17 de marzo y publicado hace una semana, daba al “no” ganador con el 51% de las intenciones de voto.
Otra encuesta, de Ipsos, divulgada el pasado lunes, subía el nivel del “no” hasta el 52%.
Según la nueva encuesta de CSA, los simpatizantes de izquierda se pronuncian mayoritariamente por el rechazo a la Constitución: un 58% contra 42% por el “sí”.
En el Partido Socialista, cuyos militantes se pronunciaron en un 59% a favor del texto en una consulta interna el pasado 1 de diciembre, el “no” se impone con un 54%, y, por primera vez, es mayoritario entre los Verdes, con un 55%.
A la derecha, el “sí” recoge el 59% de las intenciones de voto, pero el “no” ha ganado cinco puntos para situarse en un 41%.
Entre los votantes de la conservadora y gobernante Unión por un Movimiento Popular (UMP), el rechazo al texto ha progresado 8 puntos, hasta un 39%, mientras que en la centroliberal y europeísta Unión para la Democracia Francesa (UDF), retrocede hasta el 27%.
Las razones del rechazo
Preguntados sobre lo que esperan en su fuero interno, un 37% de todos los sondeados se pronuncia por la aprobación de la Constitución, mientras que un 30% apuesta por el “no” y un 33% considera que “no importa”.
Entre los adversarios de la Constitución, la oposición a la eventual entrada de Turquía en la Unión Europea es el argumento más citado (31%) para explicar su rechazo del texto.
En segundo lugar aparece el deseo de una reorientación de la política europea en materia social (29%), seguido de la voluntad de una renegociación del tratado constitucional (26%), la de expresar su descontento en general (22%) y con el gobierno de Jean-Pierre Raffarin y el presidente, Jacques Chirac (20%).
En una entrevista televisada anoche, Raffarin consideró “incierto” el resultado del referéndum y advirtió de que “cada voto contará”, al poner a “cada uno” de los franceses ante su “responsabilidad personal”.
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