Un grupo de personas rompe desde el 10 de mayo la rutina que habita la Plaza de Bolívar en Bogotá. Se trata de algunos de los impulsores del movimiento La voz de la conciencia, que acompañan a su candidato a la Presidencia de la República, Robinson Devia, en huelga de hambre.
Huelga como exigencia, como protesta, como grito que pretende romper el silencio en que lo han encajonado los medios de comunicación, que consideran que es un candidato a quien no vale la pena darle micrófono, pues “no registra en las encuestas”.
Contra esa medida de exclusión, que niega la igualdad y por tanto la democracia, previa carta abierta al Presidente de la República y otras autoridades nacionales, se manifiesta este novísimo movimiento que irrumpe en la escena política nacional con el apoyo de más de un millón de firmas, más que las logradas por un candidato como Sergio Fajardo, apoyado por importantes empresarios antioqueños y bogotanos.
Con él hablamos, y esto fue lo que nos contestó.
desde abajo: Cuando usted iniciaba la campaña electoral, ¿imaginaba que podían censurarlo?
Robinson Devia: De alguna manera sí, lo imaginábamos, porque ha sido el reflejo de 62 años de indiferencia de los partidos políticos. Cuando nosotros empezábamos, sabíamos de entrada que los medios de comunicación nacionales nos iban a ignorar. Eso sí lo teníamos claro. Teniendo en cuenta esa situación, cuando recogimos las firmas no nos presentamos como candidatura sino como movimiento. Esto causó expectativa en los medios de comunicación nacional, al decir “¿pero dónde está el candidato?”. Decíamos: “El candidato somos todos”. Y allí se genera el cuento del candidato fantasma, y los fantasmas asustan.
da: Con esa práctica, ustedes crearon una campaña de expectativas.
RD: Sí, una campaña que de alguna manera los obligó a sacarnos a la luz pública. Siento que tenían la esperanza de que fuéramos el candidato payaso, el candidato torero, que siempre aparece como el bufón del proceso electoral de cada cuatro años. Pero cuando salimos y se dan cuenta de que somos un movimiento organizado, que nace desde la base, que hay una organización real y verdadera desde lo social, comienzan a ver que hay un fundamento real desde el punto de vista democrático, participativo, y del conocimiento de la ley. Es cuando nos cierran los medios.
da. ¿Qué deciden hacer en ese momento?
RD: Es entonces cuando viene el plan B: creamos un DVD, el televisor del pueblo, y vamos regalándolo en toda Colombia. En este DVD plasmamos el recorrido nacional que hemos hecho, así como todas las propuestas. Cambiamos un poco la dinámica del marketing de un político tradicional, la foto, el comercial. No coincidimos con estas prácticas porque esto no es un reinado de belleza. Es una propuesta política de lo que se está hablando, y se gana con propuestas concretas e involucrando al constituyente primario.
da. ¿Qué explicación da el Consejo Nacional Electoral y los directores de los medios masivos de comunicación a la censura a la que les han sometiendo?
RD: Medios como RCN y Caracol dicen que lo que hacemos en la Plaza de Bolívar es una pataleta para salir en televisión. Esa es la forma de desdibujar que tienen los medios de comunicación y restarle importancia a un elemento fundamental, que es mostrar la crisis tan grave de la democracia colombiana. Y no pueden decir que es una pataleta porque aquí estamos mostrando la inoperancia del Estado, la inoperancia de los medios de comunicación, y, además de eso, estamos mostrando las fallas estructurales que tiene la democracia.
Hay que aclarar que para llegar a esta medida de fuerza desarrollamos un proceso, y aquí estamos entregándoselo al mundo, proceso al cual ninguna institución del Estado (Consejo Nacional Electoral, Registraduría Nacional del Estado Civil, Ministerio del Interior y de Justicia, División de Protección de la Policía Nacional, Procuraduría) ni los medios de comunicación nacionales dieron respuesta efectiva para cumplir la Ley 996.
da: ¿Han dicho algo sobre ustedes los seis candidatos difundidos por los medios de comunicación?
RD. Dicen respetar la ley porque la ley es sagrada, pero se contradicen porque, si fueran demócratas de verdad, fueran los primeros en decir “somos nueve candidatos”. Y por respeto al candidato primario, es necesario que los constituyentes primarios conozcan las nueve opciones existentes, para que sea la gente y no los medios de comunicación ni las encuestas los determinantes de dónde está realmente la democracia y quién debe ser elegido como próximo Presidente.
da: La huelga de hambre que están realizando es una fuerte acción de sacrificio. ¿Cuál es el objetivo de esta acción?
RD: La gente me dice que el objetivo es salir en televisión, pero no lo es. El objetivo es restituir el equilibrio informativo. El gran problema –y es lo que queremos denunciar internacionalmente– es que se respete el fundamento de la democracia: el constituyente primario, que son los 45 millones de hombres y mujeres que vivimos en esta tierra. Si nosotros no tenemos derecho a la participación, tal que lo enuncia la Constitución, entonces la democracia es una falsedad.
Este cuadrito –el plantón que el movimiento La Voz de la Consciencia ha organizado en la Plaza Bolívar– representa a la Colombia olvidada, a la Colombia no tenida en cuenta, a la Colombia que no sale en los medios de comunicación.
da: ¿No temen represalias?
RD: La gente le tiene miedo al Gobierno, tiene miedo de decir la verdad porque a quien la dice lo matan. La prueba está en lo sucedido con Galán, Gaitán, Garzón, por nombrar algunos de los reconocidos. Alguien tiene que romper este ciclo, pero no puede ser un hombre; tiene que ser un movimiento tan fuerte que no haya tantas balas para acabar a un pueblo completo y una conciencia. Eso es lo que buscamos.
da: Por la primera respuesta, entiendo que para ustedes lo importante es el movimiento y no lo electoral. ¿Qué sigue entonces para ustedes después de este episodio comicial?
RD: Venimos haciendo esto desde hace 13 años, en lo humano, lo social y lo ambiental, y nos cansamos de que estos políticos corruptos nos intimiden. Los desplazados y los indígenas han sido sometidos a la fuerza pública, al DAS. Sucede la historia de las hormiguitas con la langosta. Le tienen miedo a la langosta porque es grande. Si yo la enfrento solo, claro, es grande. Pero si nos enfrentamos unidos, ya no lo es. Vamos hacia un despertar de conciencia que ya es imparable. El DVD ya camina por todos los lugares y rincones. ¿Cómo van a detenerlo ellos? Piensan que si nosotros estamos haciendo huelga del hambre, la campaña no camina. Están equivocados. Con este DVD está caminando la campaña, el trabajo en equipo de 1.200 hombres y mujeres que iniciamos este sueño, dándole forma al país y diciendo ¡Sí se puede! Y no estamos luchando sólo por los indígenas y las negritudes sino por el ser humano colombiano. Y éste somos todos.
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