Trabajadores de Coca Cola en huelga de hambre

A partir de las 6:00 a. m. del 15 de marzo, frente a la entrada de la empresa, se inició la protesta. Participan en ella trabajadores de Bucaramanga, Cúcuta, Barrancabermeja, Cartagena, Valledupar, Cali, Medellín y Bogotá. Apartes de su comunicado:

Con esta decisión y este mecanismo de presión, denunciamos la violencia de que han sido objeto (9 trabajadores asesinados, 67 amenazados, atentados de muerte, secuestros, desplazamientos forzados, quema de sede sindical, ejecutada por paramilitares). Pero también la terminación injusta de los contratos de trabajo, la utilización de constreñimiento ilícito para obligar a los trabajadores a renunciar, la subcontratación de más del 88% de los trabajadores y el impacto que esto ha significando para las condiciones de vida de los trabajadores de planta.

Denunciamos, además, el intento de la multinacional para eliminar derechos en las negociaciones de pliego de peticiones como está ocurriendo desde el 1 de Marzo de este año.

Coca cola ha importado azúcar afectando la economía y la producción colombiana. Se aprovecha irracionalmente del agua recurso vital de la humanidad, negándose al mismo tiempo a no usar materia prima y productos modificados genéticamente. Al mismo tiempo se niega a pactar inversión social para la población”.

Precisan en su comunicado los trabajadores, “Luchamos por verdad, justicia y reparación para ello iniciamos una demanda en la corte del distrito sur de la Florida en EEUU contra las embotelladoras de coca cola y el 31 de marzo de 2003, el juez José E. Martínez concluyó que los casos bajo el Alien Tort Claims Act (“ATCA”) sobre violaciones de derechos humanos pueden avanzar, entre otros por existir una relación simbiótica entre los paramilitares y el estado”.

Más adelante explican que “…Coca cola pretende criminalizar a varios dirigentes de SINALTRAINAL al acusarlos falsamente ante los jueces por injuria, calumnia, concierto para delinquir, terrorismo, rebelión sabotaje, daño en bien ajeno y hurto calificado. Pretende justificar de esta manera la represión y persecución de los trabajadores”.

El panorama de injusticia no puede ser peor: “El Ministerio de Protección Social emitió la resolución del 25 de febrero de este año, con la cual autoriza despedir 91 trabajadores, sin tener en cuenta que la empresa ha logrado, con presiones, que renuncien más de 500 trabajadores, de los 300 que pretendía inicialmente despedir”.

Por último explican: “Coca cola no ha respetado la ley, tampoco quiere cumplir la tutela que le ordenó reubicar a los trabajadores. Se niega a aplicar los artículos 18 y 91 de las convenciones colectivas de trabajo que la obligan a no despedir trabajadores en caso de reducción de sus actividades, cierre de secciones o reestructuración, en tales casos debe capacitarlos y reubicarlos. Pretende la empresa con esto destruir a SINALTRAINAL, acabar las convenciones colectivas, eliminar la contratación directa e indefinida, reducir costos, aumentar sus ganancias, seguir atendiendo el mercado desde centros de distribución y producir en 5 mega plantas”.

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