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Introducción a la teoria de conjuntos

Hacer un rastreo meticuloso de las diversas organizaciones y grupos que se mueven en el universo estudiantil colombiano es una labor ardua y tal vez interminable. Las diferentes congregaciones y colectivos no están ahí para siempre, y se recomponen cada noche y se transforman cada día. desde abajo entrevistó a cuatro de estas expresiones organizativas que hoy se manifiestan dentro del estudiantado colombiano. Se trata de la FEU (Federación de Estudiantes Universitarios) e Identidad Estudiantil, las dos organizaciones que más se fortalecieron durante este proceso de 2011, y al Sindicato de Estudiantes de Colombia y la Red de Estudiantes Universitarios Independientes, como las algunas de las expresiones más nuevas del movimiento estudiantil(1).

La OCE (Organización Colombiana de Estudiantes), vinculada con el Moir (Movimiento Obrero Independiente y Revolucionario), también se robusteció en forma ostensible en el medio universitario. Por el contrario, la ACEU (Asociación Colombiana de Estudiantes Universitarios), ligada con la JUCO (Juventud Comunista), no contó para nada en estas jornadas. Los grupos trotskistas, tan destacados en el movimiento universitario de 1971, pasaron inadvertidos en los acontecimientos del año pasado. Otro tanto ocurrión con los diversos maoísmos, que hace escasos 10 años eran la corriente más sólida dentro del estudiantado (Guardias Rojos, Brigadas Internacionales, Partido Comunista-Maoísta, etcétera), hoy muy disminuidos, no se dejaron ver en esta nueva insurgencia juvenil. Los colectivos anarquistas no consiguieron consolidarse en la Unión Libertaria Estudiantil, que solo agrupó a un sector de la militancia anarquista. Por el contrario, Identidad Estudiantil contó con más suerte, y allegó a varias redes y coordinaciones del movimiento juvenil libertario.


Red de Estudiantes Universitarios Independientes (Reui)

da.: ¿Qué es la Red de Estudiantes Univer-sitarios Independientes?
Reui.: La Red es un esfuerzo de coordinación estudiantil que se desarrolló a partir de la coyuntura de la reforma a la Ley 30 y se da en algunas universidades públicas del país. Quienes formamos parte de la Red somos estudiantes y procesos organizativos regionales que no nos encontramos vinculados con ninguna de las formaciones estudiantiles nacionales (FEU, ACEU, OCE, etcétera). A su vez, la Red forma parte de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (Mane). Somos uno de los actores que trabajan en el impulso de la movilización, y la construcción política y programática del movimiento.

da.: ¿Para qué crear una organización estudiantil más?
Reui.: Porque tenemos diferencias con los otros sectores (FEU, ACEU, OCE…) y consideramos que el escenario Bogotá, como ciudad capital, ha centralizado a la Mane. Es fundamental que las regiones no perciban que desde Bogotá se dan la directrices sino que la Mane central hace eco de las voces regionales y desarrolla las propuestas de las bases. La Mane, como entidad coordinadora nacional, no debe dar órdenes desde arriba (cosa que ha ocurrido en el pasado en todos los procesos sociales en Colombia) sino que debe expresar la voz del estudiante de a pie. No es lo mismo que se realicen reuniones regionales, o en las facultades y universidades, y de allí salgan los mandatos, es decir, que las bases orienten a la dirección (el mandar obedeciendo), a que la dirección de la Mane desde Bogotá les dé órdenes a las bases. Sin embargo, debemos reconocer que las regiones han trabajado en descentralizar los debates, la comunicación ha sido permanente y se ha trabajado en lograr una mayor descentralización. Una segunda diferencia está en el hecho que nosotros no creemos que existan dos momentos, uno de movilización y otro de construcción del proyecto de ley alternativa de educación. Hemos venido planteando que el paro era el escenario ideal para la construcción de una propuesta educativa del movimiento estudiantil, es decir, que el paro es un escenario espléndido para discutir un modelo educativo, y un proyecto alternativo de ley. Por tanto, no era necesario levantar el paro para pasar a la fase de construcción de propuestas. La otra parte de nuestra propuesta de Red de Estudiantes Independientes es la realización de una Constituyente Universitaria donde todas las regiones hablemos de igual a igual en una construcción colectiva, desde abajo, y desde la periferia, de esta manera el proceso le dará la voz a todo el país.

da.: ¿Cuál pudiera ser la metodología para construir un proyecto alternativo de ley?
Reui.:En la Universidad del Tolima se ha vivido una tras otra, una serie de crisis en los últimos cuatro o cinco años. Crisis ética, administrativa, económica, académica, en fin, y es allí donde los estudiantes hemos decidido por consenso, en una asamblea multiestamentaria, la realización de una Constituyente Universitaria. Se desarrolla así una discusión sobre los ejes temáticos que debe tener tal constituyente, sobre el tipo de universidad que queremos y sobre cómo llegamos a ese tipo de universidad. También hemos definido los actores que pueden participar en la Constituyente. En un principio, éstos deben ser todos aquellos que tienen que ver en forma directa con la universidad. Nos referimos a estudiantes, padres, profesores, trabajadores, egresados, pensionados y otros. En un segundo momento, aspiramos a vincular a sectores populares como indígenas, afros, trabajadores, desempleados, transportadores, habitantes de los barrios y las veredas, etcétera. Creemos que este es un mecanismo adecuado para recuperar la Universidad del Tolima, y esperamos que esta experiencia sea recogida por la Mane en la construcción de una nueva ley de educación que integre a personas cuyas ideas y opiniones nunca han sido tenidas en cuenta y siempre se les ha excluido de la posibilidad de mandatar sobre la educación del país.

Consideramos que la Constituyente es un proceso. No es una sola asamblea sino un proceso que esperamos que se construya desde los salones, desde las universidades, desde las regiones, desde los barrios, desde las calles. Un proceso en que se puedan reunir quienes consideren que tienen algo que decir sobre la educación en Colombia. De esta manera, cada uno aportará los elementos que debiera contener un nuevo modelo educativo. Es fundamental que se les dé la voz a los escenarios regionales y que se tengan en cuenta los documentos que ya se han venido trabajando en las universidades.

Al final, veremos un gran escenario nacional al cual llegarán todos los que tengan que ver con la educación, además de todos los sectores populares que se sientan interesados en aportar a este tema, para así definir el modelo y la ley que corresponde a ese tipo de educación. Luego se convocaría a la nación para que refrende esa ley. Es decir, que ésta se convierta en un mandato popular.ν


Sindicato de Estudiantes de Colombia (SEC)

da.: ¿Cuál es el origen del Sindicato de Estudiantes de Colombia?
Sec.: El Sindicato nace el 12 de octubre de 2010. Somos un grupo de estudiantes que veníamos de hacer trabajo de base al interior del Sena, una labor juiciosa y constante de varios años. El Sindicato de Estudiantes de Colombia es un escenario que nos ha permitido integrar lo obrero y lo estudiantil, en razón de que el trabajo del Sena así lo permite (esta institución articula el proceso estudiantil y el medio laboral). Sin embargo, no somos solo Sena. Hoy en día tenemos organización en universidades, empresas, instituciones técnicas y colegios, en un trabajo amplio en que podemos abarcar temas como el primer empleo, la formación profesional, la desregularización laboral, el contrato de aprendizaje, el desempleo, la seguridad social. Eso nos permite considerarnos como un escenario amplio de carácter obrero-estudiantil dentro de una misma organización. Nuestro origen es la necesidad de encontrar puntos de acción entre el movimiento obrero y el estudiantil que en apariencia tienen problemas diversos pero que de fondo son similares.

da.: ¿Para qué crear una nueva organización estudiantil cuando ya existen muchas organizaciones gremiales?
Sec.: Son dos nuestras razones. La primera, que el sindicato no obedece a la estructura política de un partido, es decir, el sindicato no es la correa de transmisión de una organización política (caso ACEU, como expresión estudiantil de la Juco o la OCE del Moir). El Sindicato es una organización que nace desde los estudiantes independientes, estudiantes que no nos sentíamos representados en las organizaciones estudiantiles que expresan a tal o cual proyecto político.

En segundo lugar, porque la organización estudiantil tiene muchos procesos, pero casi todos centrados en lo universitario. Pensamos que hacía falta una colectividad que articulara secundaria, instituciones técnicas, Sena, y lo universitario público y lo privado. Nacemos con la idea de integrar el discurso de lo educativo como algo transversal, la educación, su calidad, su cobertura, la inversión pública en educación, etcétera, como un debate dentro de la sociedad colombiana. Estimamos que el nombre de “sindicato” nos permite reivindicar nuestro carácter de clase y unir lo estudiantil con la lucha de los trabajadores. Por tanto, somos una organización no sólo estudiantil sino también de trabajadores en formación.

da.: ¿Además de estas particularidades, cuál sería su proyecto de trabajo?
Sec.: Tenemos una plataforma que tiene dos grandes escenarios: el primero, el de reivindicar formas alternativas de ver tanto el trabajo como la educación en el país, y así trabajar propuestas que les permitan a trabajadores y estudiantes ser sujetos decisivos en las definiciones que se toman sobre estos temas; el segundo, la posibilidad de integrar las diferentes luchas sociales, procesos que vayan más allá de lo estudiantil. El problema del país no es sólo la Ley 30, la Ley 100 o la Ley del primer empleo. El problema de fondo es el sistema económico y político que hoy tiene el país.

da.: ¿En el curso del movimiento estudiantil contra la reforma a la Ley 30, qué le aportó el Sindicato al proceso?
Sec.: El hecho de no pertenecer a ninguna de las organizaciones tradicionales de la izquierda nos permite darle una visión heterodoxa al proceso, pues se han dado debates que van más allá de lo gremial, aportando así elementos que superan los fríos cálculos de grupo político que busca créditos electorales o de aparato. También, trascender lo universitario, que la sociedad colombiana no percibiera que los universitarios éramos los únicos que luchan por una educación pública, gratuita y de calidad sino que esta lucha vinculara, por un lado debates como el empleo y la salud, y por otro lado al conjunto de la nación colombiana.


Federación de Estudiantes Universitarios (FEU)*

La Federación de Estudiantes Universitarios de Colombia (FEU) nace en 2005 como una organización político-gremial orientada a recoger todas las experiencias del movimiento universitario y estudiantil: grupos de trabajo, colectivos de trabajo, grupos de estudio, grupos de investigación, grupos culturales, pero también con la intención de acercar a las diversas expresiones de lo juvenil en Colombia. Aquí encontramos los colectivos juveniles que trabajan temas como el rechazo a la tauromaquia, las reivindicaciones de género, lo cultural, lo ambiental, el arte, y todas las nuevas expresiones y manifestaciones de los jóvenes. Entonces construimos un proceso federado, proceso que hoy aglutina lo universitario público (estamos en todas las universidades públicas del país) y tenemos presencia en las universidades privadas, centro técnicos y secundaria.

Apenas surge la FEU, ésta es víctima de una campaña de estigmatización y señalamiento emprendida por el gobierno de Álvaro Uribe. La totalidad de la dirección es amenazada y muchos de sus miembros se ven obligados a exiliarse por temor a ser asesinados, como ocurrió con el compañero Martín Hernández en Medellín. Nos encontramos con que al mismo tiempo que hacíamos un trabajo muy bello, muy creativo, amplio, vinculando todas las expresiones culturales, científicas y organizativas del movimiento estudiantil, éramos perseguidos y señalados, vinculándonos con la insurgencia. Recordemos que este es un período de gran violencia contra el movimiento estudiantil, en que son asesinados Óscar Salas, Johnny Silva, Nicolás Neira y otros compañeros.

Realizamos el Segundo Congreso en Bogotá en 2008 con la consigna “Construyendo caminos de unidad”, buscando una mayor convergencia estudiantil. A partir de este momento se da una segunda fase de la represión contra la FEU. La Directora del DAS (hoy prófuga en Panamá) nos acusa de tener nexos con la insurgencia, y crecen las amenazas del paramilitarismo. A pesar de esto, la Federación llega a nuevas regiones y departamentos. El Tercer Congreso se desarrolló en Bogotá en septiembre de 2011 con la participación de 2.500 delegados de todo el país. Emitimos una declaración que recoge muchos de los elementos que se han trabajado en la Mane y decidimos impulsar el proceso de unidad de las organizaciones estudiantiles. También construimos un programa de lucha y trabajo que en gran medida se recoge en el Programa Mínimo de los Estudiantes. Nuestro interés es que se fortalezca la Mane como plataforma de lucha y que esto contribuya al fortalecimiento del movimiento social.

Creemos que el aporte que hemos hecho al movimiento estudiantil y al movimiento social en general es haber demostrado que es posible hacer movimiento social desde una resistencia radical, no desde una resistencia media, tibia, conciliadora y funcional al sistema. Una resistencia radical, a partir de la desobediencia de la gente decimos que las comunidades tienen derecho a la indignación y que esta resistencia radical puede transformar las estructuras sociales.

* Entrevista con Jairo Rivera, vocero y dirigente de la FEU.


Identidad Estudiantil

Identidad Estudiantil es un proceso que articula nacionalmente a diferentes colectividades juveniles y estudiantiles. Nacemos en 2002 en Neiva, en el curso de una asamblea que logra acercar una serie de procesos regionales que estaban dispersos hasta ese momento. La primera propuesta se orientaba a desmarcarse de las organizaciones tradicionales que existía dentro del movimiento estudiantil, y que a nuestro juicio habían utilizado y manipulado la organización gremial.

Debido a la represión estatal y paraestatal, se da un reflujo hasta 2005, año en el que realizamos una Segunda Asamblea Nacional de Identidad Estudiantil. Este encuentro se desarrolló en la ciudad de Bucaramanga. Entre 2006 y 2008, los trabajos locales toman más cuerpo y jalonan el desarrollo de Identidad Estudiantil. En 2009 se hace una nueva asamblea en la cual logramos concretar una propuesta organizativa que podemos resumir en temas como:

  • Concebir la organización gremial como incluyente y plural, que permita recoger la diversidad existente en el estudiantado.
  • Considerar una organización estudiantil autónoma, lo que implica que son los estudiantes quienes definen cómo se construye y se estructura, y que sean los estudiantes los que elaboren sus principios, programas, propuestas y acciones.
  • Trabajar por una educación pública con financiación estatal y que en la dirección de la U participe la comunidad educativa. Una U que dialogue con la sociedad, y no esté mediada por la empresa privada. Muchos de estos elementos están hoy en el Programa Mínimo de los Estudiantes.
  • En lo ideológico, Identidad Estudiantil tiene una influencia fuerte del pensamiento de personas como Camilo Torres y otros pensadores latinoamericanos.
  • Desde su fundación, hemos tratado de mantener el espíritu horizontal del proceso. No tenemos una dirección ejecutiva o una presidencia sino que somos más colectivos. Dos o tres veces al año hacemos una reunión de una Coordinadora Nacional donde participan al menos dos delegados por cada proceso o localidad, y se hace un plan de trabajo. Actuamos por una organización estudiantil horizontal y nos oponemos a que se tomen decisiones a puerta cerrada, de espaldas a los estudiantes.
  • Otra diferencia con las organizaciones estudiantiles tradicionales es que no nos consideramos la única organización de estudiantes de los colombianos. Reconocemos que somos otro proceso, pero no el único o el más grande o el más representativo. Finalmente, ratificamos que le apostamos a fortalecer la Mane como un espacio nacional que integra y coordina las organizaciones estudiantiles.

Rebeldía Estudiantil Organizada (REO)

¡Por la vida, la cultura y la libertad, vamos junt@s, compas, a estudiar y luchar por la liberación nacional!

Un pueblo sin historia es un pueblo sin futuro. Y esto es también válido para el aguerrido Movimiento Estudiantil y las organizaciones que en su seno nacimos y crecemos. Así que nos presentamos: somos Rebeldía Estudiantil Organizada, una formación política de estudiantes de Derecho, humanidades, ingenierías, ciencias y secundaria, estudiantes como tú o como yo, con una gran historia que contar.

Falso de toda falsedad es que la historia de las organizaciones empieza de repente; que nacemos por capricho y que nacemos sin otra gran historia detrás. Nadie es hijo de la nada, y eso también es aplicable a nosotros, a nosotras. Además, las organizaciones, como expresiones organizadas del estudiantado que somos, nos entrelazamos estrechamente con la historia del movimiento estudiantil y hacemos parte de ella.

Pues, bueno, les contamos que nuestra historia se remonta a más de 30 años atrás, a finales de los años 70, esos años subsiguientes a la desaparición de la histórica Federación Universitaria Nacional (FUN) de los 60 –y resonancia de otros procesos, muchos años antes–, cuando las banderas de ¡A estudiar y luchar! empezaban a mostrarse como factores de agitación y concientización en las universidades. En aquellos años, el Movimiento Estudiantil reflexionaba profundamente sobre cómo dejar de ser un bafle de resonancia de los conflictos sociales colombianos, para pasar a constituirse como uno nuevo, desde el sector estudiantil y de la mano del pueblo. Así que somos también producto de esa gran discusión en la que se debatía intensamente acerca del papel del Movimiento Estudiantil y de cada uno de nosotros, de cada una de nosotras, como estudiantes, en el proceso de transformación social.

Por todo ello, afirmamos que, como expresión política, somos resultado de una corriente de reagrupación y reconstrucción. De reagrupación, como expresión organizada permanente, como experiencia de vivencia colectiva, como escuela de formación que ha buscado desde sus comienzos ser centro de agrupación política de estudiantes que entienden la necesidad de ir mas allá de la lucha reivindicativa del Movimiento Estudiantil, que buscan traspasar los muros de las universidades y colegios para fundirse con el pueblo. De reconstrucción, porque nos consideramos hijos e hijas de una doble tendencia a la unidad y la rectificación; a la unidad, porque desde nuestros comienzos hemos entendido la necesidad de constituir una gran organización política que recoja la línea política a la que nos adscribimos; y de rectificación, como expresión no sólo de una concepción particular hacia el trabajo estudiantil sino también como foco de preocupación por la Colombia que buscamos. ¿Y cómo conseguir estos propósitos? Rompiendo con viejas fórmulas y corazas que solían presentarse como camisa de fuerza de la revolución en Colombia.

Nuestra historia y nuestra línea política, como expresión organizativa, se adscriben firmemente a la tendencia guevarista en el país, que recoge creativamente las experiencias, vivencias y enseñanzas del Che Combatiente, síntesis del marxismo latinoamericano, y las funde con las banderas y las luchas de José Antonio Galán y Camilo Torres Restrepo en Colombia. Esta adscripción implica, además, que luchamos por un proyecto político específico: la Liberación Nacional y la construcción del Socialismo en Colombia.

Como quintaesencia de esta línea política y de esta tendencia guevarista, levantamos como consigna central ¡A estudiar y luchar por la liberación nacional! Buscamos tener claridad acerca del proyecto político al que con amor y dedicación le entregamos sonrisas y suspiros, pero, además, convencidos de que ser estudiante y ser revolucionario no es excluyente sino todo lo contrario, convergente; convencidos de que estudiar y luchar son más que unos verbos que expresan acciones determinadas que necesariamente se desarrollan en lugares y momentos diferentes, entrelazándose, encontrándose y complementándose.

Para nosotros, para nosotras, como estudiantes, tales asuntos tienen un momento y un lugar concretos: aquí y ahora, en el aula y en la calle. Buscamos recoger esa voz a veces silenciosa, tímida o airada del estudiante ‘corriente’, descubriendo nuevos canales, mejores rumbos, más amplios horizontes; procurando, en fin, soluciones alternativas y concretas para reivindicar lo nuestro, lo que nos corresponde y pertenece como estudiantes; para reencontrar nuestra lucha con el torrente obrero y popular que en campos y ciudades, poco a poco, inunda a la patria de un futuro soberano y digno.

Entonces, ¿qué hacemos los muchachos y las muchachas de Rebeldía Estudiantil Organizada? Pues, como veníamos contándoles, somos estudiantes que viven y sienten que la escuela, tal como existe, no corresponde al país que queremos; no responde a las necesidades del pueblo pobre y la clase trabajadora, a las necesidades de aquellos y aquellas que todo lo hacen y nada tienen. Decidimos organizarnos como fuerza colectiva que busca proponerle algo al estudiantado, y asimismo a nuestro pueblo luchador y rebelde: sí es posible cambiar el mundo; sí es posible la lucha organizada por aquel país de nuestros sueños; sí es posible que, como estudiantes, nos acojamos al pensamiento del Che Combatiente cuando invitaba al pueblo a romper las barreras que lo separan de la Universidad, haciéndola suya, del tamaño de sus necesidades y esperanzas.

¿Qué es, entonces, lo que queremos decirles? Pues, precisamente que, como organización, como estudiantes rebeldes organizados, somos un centro de agrupación, un espacio colectivo en el que buscamos hacer realidad todo esto; que somos el espacio en el que, como un liberador grito atronador de batalla, debe resonar el ¡A estudiar y luchar! Y lo fundimos como una sola cosa, como un cuerpo organizado de rebeldes militantes que construyen compromisos y aportes a la transformación radical de la sociedad, un objetivo que incluso debe sobrevivir a nuestro tránsito estudiantil y prolongarse en los lugares sociales que señalen, que muestren nuevos roles.

Información adicional

Las nuevas organizaciones estudiantiles
Autor/a: Diego Sánchez González
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