Hoy somos nosotros mismos, la constatación de cómo el gobierno Colombiano ejerce autoritaria e ilegalmente su poder. Hoy nosotros mismos padecemos como tantos otros compatriotas la tenebrosa ingeniería de la mentira y el engaño. A pesar del estéril panorama generado por la ausencia de una política estatal, destinada a estimular y promover a las expresiones libres y genuinas de la cultura popular, nuestra labor artística recibe al fin y muy a nuestro pesar la atención de estamentos oficiales del gobierno.
Hoy luego de 13 años de acompañar con nuestro canto distintas y variadas iniciativas para la construcción de una sociedad justa, equitativa y más humana; recibimos el único tratamiento que podríamos concebir del actual régimen… un tratamiento de guerra. Somos un proyecto cultural digno de la mirada oficial, no para exhibirnos como prueba que en Colombia la libre expresión es un derecho respetado; si para mostrarnos como artistas, ciudadanos que reúnen lo suficiente, para hacerse molestos y para ser acusados de terrorismo en virtud de su manifiesta discrepancia con el modelo de sociedad que se impone desde el gobierno. Todos aquellos y aquellas que han conocido de nuestro trabajo y coreado nuestras canciones saben también que como Colombianos no hemos ocultado nunca nuestra preocupación por la grave crisis humanitaria que acosa a nuestra nación.
Hemos manifestado en múltiples escenarios y foros nuestra disposición a sumar, para que se curen las dolorosas heridas que la injusticia, la impunidad y la guerra esparcen en todo el territorio colombiano. Hoy, desde aquí, tras los barrotes, frentamos una vez mas a los amantes soñadores de una Colombia para todos a que no desmayen en su esfuerzo por lograrlo. Nosotros, señalados por velos sin rostro, que esperan el pago arrojado por la fórmula de delación en que se ampara la política de seguridad democrática, reiteramos la invitación a que cada uno y cada una dedique lo mejor de sí para liberar a nuestra tierra y sus gentes del ensombrecido presente que pretende prolongar este imperio malsano del engaño. No les quepa duda que nosotros no desfalleceremos nunca en hacer lo que nos corresponde y todo como siempre será cantado. Fraternalmente y agradeciendo vuestra presencia y vuestro acompañamiento….
viernes, 18 de junio de 2004
Leave a Reply