Estimados/as lectores/as compartimos la serie de artículos más leídos durante el 2024. Una relectura necesaria de hechos y proyecciones de diferentes temas tanto nacionales como internacionales. Esperamos que su lectura sea de utilidad.
Amparados en la Resolución 1730 del 31 de diciembre de 2015, concedida por la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales al Ministerio de Defensa para que la Armada Nacional construya una “Estación de Guardacostas en el Parque Natural Gorgona”, y sin reparar en evidencias y reclamaciones de actores sociales, el actual gobierno prosigue con un proyecto que desdice, a todas luces, de su discurso ambientalista.
Colombia es un país destacado por su rica biodiversidad, entre otras, por su privilegiada localización en el extremo norte de Suramérica, lo que le permite gozar de los océanos Caribe y Pacífico, además de su estancia en la zona ecuatorial, sus 43 Parques Nacionales Naturales y 18 Santuarios de Flora y Fauna, entre otros. Alberga una importante parte de la selva del Amazonas y el andén del Chocó biogeográfico. No obstante que de los 114 millones de hectáreas (que suma su territorio), 42 están dedicados a la agricultura, y de ellas 38 dedicadas a pastizales donde se levanten 25 millones de cabezas de ganado vacuno, dejando solamente 4 para la agronomía de pan coger.

En este andén del Chocó biogeográfico que se despliega por Colombia desde el este de Panamá hasta el noroeste de Ecuador, se encuentra Gorgona, una bella isla en el mar Pacífico colombiano, que fue prisión de máxima seguridad desde 1960 hasta 1984, fecha en la cual y después de haber sido declarada Parque Nacional Natural (PNN) por el entonces Instituto Nacional de Recursos Naturales (noviembre, 1983) con la presión de organizaciones ambientalistas y de derechos humanos, fue clausurada como cárcel.
El Parque Natural Gorgona que comprende 1.568 hectáreas terrestres, goza de una alta pluviosidad como bosque húmedo tropical, permitiendo la recuperación y conservación de sus endemismos y biodiversidad única que comprende: 381 especies de peces, 155 de aves, 35 de reptiles, siete de anfibios y 430 tipos de plantas con flores, de las cuales el 4 por ciento son endémicas. Es zona de permanencia de los delfines moteados, área de desove de las tortugas marinas (verde y carey en peligro de extinción) y lugar de paso, parto y apareamiento de las ballenas yubarta. Además, contiene uno de los arrecifes coralinos más desarrollados y único del Pacífico Oriental Tropical y más extensos del Pacífico colombiano.

Las míticas ballenas yubartas conocidas como las Jorobadas por el arqueo del lomo antes de sumergirse por las profundidades de Poseidón, dios de los mares y agitador de la Tierra, recorren más de 8 mil kilómetros desde el Antártico hasta el Pacífico colombiano, expedicionarias que pasean por santuarios de flora y fauna como Nuquí, Málaga e Isla Gorgona, sala cuna en donde emergen sus ballenatos y reciben sus amamantamientos (75 a 150 litros diarios de leche) así como sus primeras lecciones de vida de las bellas hembras de 40 toneladas, siempre más grandes que los machos, quienes después del destete se enfilan en sus extraordinarias “carreras de calor” que llegan a congregar hasta 10 machos persiguiendo a 1 hembra, como preludio de uno de los rituales de apareamiento más exóticos y salvajes de la naturaleza, en las que se utilizan trucos como “cortinas de burbujas” para desorientar a los contrincantes.
El PNN Gorgona fue incluido por la Unión Internacional para la Conservación de Naturaleza (Uicn) en la “Lista Verde”, un potente estímulo, inspirando a las áreas protegidas para cumplir los estándares y convertirse en ejemplos de las mejores prácticas mundiales para su conservación.
No obstante estos atributos naturales, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) adscrita al Ministerio de Ambiente, expidió la Resolución 1730 del 31 de diciembre de 2015 al Ministerio de Defensa para que la Armada Nacional de Colombia construya una “Estación de Guardacostas en el Parque Natural Gorgona” proyecto militar que comprende 4 obras: a) Una torre de comunicaciones con un radar en el punto más alto de la isla a 330 m.s.n.m. que emitiría 9,14 gigahercios; b) La construcción de un muelle de 182 metros; c) La construcción de una Estación de Guardacostas de tercer nivel (con bloque administrativo, bloque alojamiento infantes y oficiales, bloque de cocina y comedor); d) La construcción de un tanque de almacenamiento de 7.000 galones de combustible para abastecimiento mensual de gasolina y diésel.

El radar con su emisión permanente 9,14 gigahercios, implicaría una radiación ionizante con suficiente energía para dañar el ADN y causar cáncer, por la absorción de la radiofrecuencia en los tejidos blandos, según lo documentan la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud y el Instituto Nacional del Cáncer de los Institutos Nacionales de la Salud del Gobierno de Estados Unidos. Esto podría lesionar a las ballenas yubarta, los delfines moteados, las tortugas carey y verdes, así como a los murciélagos fruteros que habitan en la Isla.
Un proceder en contravía de lo normado. La Constitución de Colombia estableció que el Estado debe proteger las riquezas naturales, así como los ecosistemas frágiles. El Código de los Recursos Naturales Renovables y de Protección al Medio Ambiente, prescribió en su artículo 331: “Las actividades permitidas en el sistema de parques Nacionales son las siguientes: a. En los parques Nacionales, las de conservación, de recuperación y control, investigación, educación, recreación y de cultura”, precisando que las actividades de recuperación y control, comprende estudios e investigaciones para la restauración total o parcial de un ecosistema o para acumulación de elementos o materias que lo condicionan, nada de lo cual pretende la proyectada Estación Guardacostas en Gorgona que termina siendo, a todas luces, una base militar, cuya construcción está financiada por el Fondo Antinarcóticos de los Estados Unidos, con una partida de 12 millones de dólares.
Desde los momentos previos a la expedición de la cuestionada licencia ambiental, la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (Cuerpo Consultivo del gobierno nacional) expresó su preocupación pues dicha obra militar perjudicaría los valores objeto de conservación del Parque y por lo mismo la inclusión del PNN Isla Gorgona en la lista verde de la Uicn. Igualmente el Comité Científico de Gorgona, conformado por 16 investigadores de las Universidades de Antioquia, Los Andes, del Valle, Pontificia Javeriana, así como las Fundaciones Yubarta, Cimad y Squalus, la Asociación Calidris y el Grupo de Investigación Paleoexplorer, manifestaron al entonces Presidente de la Colombia Juan Manuel Santos (2015), que preferirían que dejaran a Gorgona tranquila como lo que es: un área para la protección de nuestro patrimonio natural.
Otro de los elementos normativos transgredidos por el gobierno, en este obrar en contra de toda evidencia, es la omisión de la Consulta Previa e Informada establecida por el Convenio 169 de 1989 de la OIT y ratificada por el país mediante Ley 21 de 1991. Nunca realizaron la Consulta Previa a las comunidades negras relacionadas con el Parque Natural Gorgona, amén de que la Isla es un corregimiento del municipio de Guapi, sencillamente han realizado reuniones informativas después de otorgada la licencia ambiental, amparados en una certificación del Ministerio del Interior que dice que no existen comunidades negras en Gorgona.
El Parque, administrado por la Unidad de Parques Nacionales Naturales adscrita al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, celebró en agosto de 2010 el “Acuerdo de Uso con la comunidad de Pescadores de Bazán – Consejo Comunitario Bajo Tapaje y del Mar”, como uno de los principios de interés común, para los procesos de ordenamiento ambiental, reconociendo varios niveles de gestión tanto en lo regional como en lo local, valorando la articulación y el fortalecimiento de las diferentes iniciativas en marcha, precisando que: “Los pescadores artesanales de Playa Bazán, presentan una tradición de uso en el territorio amparada en su práctica tradicional de pesca, para los cuales Gorgona no solo forma parte de su concepción de territorio sino que hace parte de su “hacer” pues ella connota la puesta en escena de los conocimientos heredados generacionalmente, es refugio, fuente de agua, punto de ubicación y espacio de trabajo. La tradición que el pescador de esta comunidad ha tejido con la isla se rompió por la instauración del área protegida sin embargo sus niveles de resistencia y fijación al reconocimiento de la misma como parte de su territorio se ha mantenido en el tiempo y a conducido a que hoy se respete el área como espacio protegido pero se reconozca el acceso al espacio como sitio de llegada y refugio”. En virtud de esto, desde esta época en la Isla Gorgona funciona la Casa de los Pescadores, a la que ellos llegan a descansar después de las extenuantes faenas marinas.
Como Director de la Fundación Biodiversidad y en concurso con el Círculo de Pensamiento Ambiental, hemos interactuado desde noviembre de 2022, logrando ante la Autoridad de Licencias Ambientales el reconocimiento como Terceros Intervinientes y la obtención de información documental relevante para la solicitud de Audiencia Pública Ambiental que ha sido denegada por esa autoridad, no obstante que hemos acudido al Tribunal de Cundinamarca y al Consejo de Estado, incluso a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos pidiendo medidas cautelares de protección de las ballenas yubarta, las tortugas verde y carey, los delfines moteados y las anguilas de jardín como sujetos internacionales de derecho. Hemos alegado que la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en Opinión Consultiva OC-23 de 2017 a petición del Estado de Colombia, justipreció: “Esta Corte considera importante resaltar que el derecho al medio ambiente sano como derecho autónomo, a diferencia de otros derechos, protege los componentes del medio ambiente, tales como bosques, ríos, mares y otros, como intereses jurídicos en sí mismos, aún en ausencia de certeza o evidencia sobre el riesgo a las personas individuales. Se trata de proteger la naturaleza y el medio ambiente no solamente por su conexidad con una utilidad para el ser humano o por los efectos que su degradación podría causar en otros derechos de las personas, como la salud, la vida o la integridad personal, sino por su importancia para los demás organismos vivos con quienes se comparte el planeta, también merecedores de protección en sí mismos”.
La Mesa para la Gobernanza Ambiental del Territorio Insular, Étnico y Estratégico Gorgona – Sanquianga como espacio de diálogo y construcción, conformada por autoridades étnicas, organizaciones de base, de jóvenes, mujeres, pescadores, piangueras, comunidad científica, académica, ambientalistas, juristas, gremio ecoturístico, comunidad Lgbtiq+, sector educativo, entre otros, del litoral caucano y nariñense, en reunión del 11 al 12 de abril de 2023, reafirmó su indeclinable rechazo a la base militar, así como lo hizo directamente al presidente Petro en su gira por el Litoral Pacífico en febrero de este año, exigiendo la revocatoria de la licencia ambiental. No obstante que la misma fue expedida por el gobierno Santos (31 de diciembre de 2015), el actual gobierno la ratificó mediante resoluciones de mayo y diciembre del año 2023.
Conscientes de las implicaciones que tiene la intervención física en el PNN Isla Gorgona, con las emisiones de radiación por medio de los aparatos que allí instalarán, interpusimos nueva Acción Popular ante el Tribunal de Cundinamarca, así como una Acción de Tutela en representación del Consejo Comunitario de Comunidades Negras Bajo Guapi. También solicitamos, nuevamente, la celebración de una Audiencia Pública Ambiental por parte del gobierno nacional. Además, en concurso con el Comité Salvemos Gorgona acudimos ante Walker Turk, Alto Comisionado para Derechos Humanos de las Naciones Unidas, para que se inste y/o requiera al Estado de Colombia a través de su gobierno nacional, a que se retire una campaña de desprestigio y censura contra los activistas ambientalistas que nos oponemos a la construcción de una base militar en el Parque Natural Isla Gorgona, pues se está exponiendo nuestra libertad de opinión y nuestras vidas, desprendido todo ello de una rueda de prensa en Casa de Nariño del pasado 12 de febrero en la que los Ministros de Ambiente y Defensa, en concurso con los directores de Parques Nacionales y la Autoridad de Licencias nos tildan de promotores de falsas noticias, no obstante que Colombia ocupa el primer lugar en homicidios a ambientalistas (según la ONG Global Witness), arriesgando nuestras vidas al afirmar el presidente Petro en la ceremonia de graduación de la Armada Nacional (junio, 2023): “alguna protesta bien intencionada que tiene que ver con la ecología y con el mar, pero otras interesadas en que no tengamos un radar para vigilar las embarcaciones que se van, que ojalá podamos detener al máximo lo que será la financiación de la muerte en Colombia si no lo hacemos”.
No es un actuar casual ni improvisado. Hemos reclamado con persistencia y autoridad política (pues acompañamos la elección de Petro), que se acabe la brecha entre el florido discurso ambiental petrista en los escenarios mundiales y la realidad nacional, pues la construcción de una base militar en Gorgona además del riesgo ambiental en este santuario de fauna y flora, rompiendo el Principio de Precaución, conlleva una pérdida de la soberanía nacional, no obstante que delante del presidente de México López Obrador (septiembre, 2023), en Cali reconoció el Presidente colombiano que es evidente el fracaso de la lucha armada contra el narcotráfico. Es hora de ponerse serio, pues el movimiento ambientalista colombiano tiene una larga trayectoria mundial que no trastocará ningún osado gobernante.
* Abogado ambientalista litigante. Director de la Fundación Biodiversidad para la promoción y protección de los derechos ambientales (1991) y vocero del Círculo de Pensamiento Ambiental (1997). Autor de varios libros sobre derecho ambiental. Director del periódico La Ciudad y del programa de televisión Crítica y Pensamiento Ambiental.
Suscríbase

https://libreria.desdeabajo.info/index.php?route=product/product&product_id=179&search=susc
Leave a Reply