La señal de que hoy ya no lo está es que ese potencial innovador está ausente, y que el anarquismo actual, eso es grave, repite más que crea, repite más que inventa. Se hace pues imprescindible emprender la deconstrucción del anarquismo para sacar a la luz y acotar lo que le está lastrando y, de esa forma poder actualizarlo.
Entrada