Un taxi aéreo sin pasajeros sobrevoló Jerusalén como parte de un experimento orientado a desarrollar una red de drones con la finalidad de aliviar el tráfico. La nave, fabricada por una empresa china, despegó el miércoles del helipuerto del hospital de Hadassah para una prueba de unos minutos sin pasajeros.
Este vehículo autónomo eléctrico tiene una cabina para dos pasajeros y puede volar hasta 35 kilómetros, según los organizadores del experimento, entre ellos el Ministerio de Transporte de Israel y operadores de drones privados. Lo que ven aquí es un taxi aéreo que en el futuro podrá transportar personas de un lugar a otro, afirmó Daniella Partem, de la Autoridad de Innovación.
Israel es uno de los pioneros en el desarrollo de drones que utiliza con fines militares y que su ejército despliega para vigilar zonas palestinas de Cisjordania ocupada y la franja de Gaza, así como a algunos de sus países árabes vecinos.
Desde 2019, la Iniciativa Nacional de Drones de Israel está dedicada a construir taxis aéreos para transportar pasajeros y carga que puedan aliviar los fuertes problemas de tráfico en sus rutas.
Hasta la fecha se han realizado más de 20 mil vuelos experimentales de naves no piloteadas de diferentes tamaños y se enorgullece de ser una referencia internacional en este campo.
El plan nacional de drones prevé una inversión de 60 millones de séqueles israelíes (16 millones de dólares) en los próximos dos años para el desarrollo de los vuelos para uso civil.
Esto va a permitir que varias empresas tengan drones en vuelo en la misma zona y al mismo tiempo, y tener despachos para uso médico y entregas de comida simultáneamente, explicó Partem a los periodistas. Esto va a ayudar a crear un mercado que sea viable económicamente. Destacó que la tasa de accidentes desde que empezaron las pruebas es de menos de uno por cada 2 mil vuelos.
Para Libby Bahat, director del departamento de infraestructuras aéreas de la Autoridad de Aviación Civil, el principal desafío es la seguridad. La de las personas en tierra y, en un futuro, en los vehículos, y explicó que los parámetros deben incorporar las carreteras, los edificios y las vías férreas.
El Instituto nacional informó que ya ha realizado pruebas para trasladar muestras de sangre.
Bahat afirma que es difícil estimar el precio exacto de este servicio, pero señaló que va a seguir siendo caro como para que en un futuro próximo sea usado en la entrega de un plato de sushi a 5 dólares.
Este no es el único experimento de un taxi dron y varios países han realizado ya vuelos de prueba, por ejemplo Francia, de cara a los Juegos Olímpicos de 2024.
Leave a Reply